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Alimentos Transgénicos: qué son y por qué son peligrosos

Los alimentos transgénicos son aquellos alimentos que se han conseguido a partir de una modificación genética. Su comercialización y su consumo están presentes en diversos países aunque lo cierto es que están envueltos de cierta polémica por lo que a continuación, analizamos ahora en qué consisten, qué beneficios tienen y como no, qué riesgos.

Este tipo de alimentos, los transgénicos, añaden a su composición algún ingrediente que procede de otro organismo y que permite que tengan genes de otra especie. Son alimentos bastantes consumidos en las típicas dietas. Un avance tecnológico que para muchos supone una verdadera amenaza a la salud y además un aberración genética.

¿Qué son los transgénicos?

El nacimiento de los alimentos conocidos como transgénicos supone el que mediante técnicas de laboratorio se pueda conseguir modificar el ADN natural de algunos alimentos para conseguir así el crear otros que aunque parecen más completos, no son más sanos.

De este modo muchos alimentos que se cultivan, como por ejemplo el maiz, si se someten a este tipo de tratamientos, pueden hacer que se conviertan en más resistentes a las plagas o a los herbicidas.

En más de 20 países se trabaja con tecnicas que permiten el “modificar” el adn de alimentos que a la larga se consumen por lo que existen beneficios al respecto, pero también inconvenientes y no sólo relacionados con la salud de nuestro propio organismo sino que además también muchos ecologistas hablan de las consecuencias ambientales y ecológicas que tienen los alimentos transgénicos.

Es bastante difícil saber con seguridad que tipo de alimentos, de los que consumimos, tienen un orígen transgénico, aunque por ley se han de etiquetar aunque si queremos estar seguros os recomiendo la guía , “Guía roja y verde de alimentos transgénicos” que ha elaborado Greenpeace.

El origen de los transgénicos

Aunque en la actualidad los alimentos transgénicos son algo que están a la orden del día, lo cierto es que debemos añadir que la biotecnología básica de los alimentos  que lleva a la modificación de su ADN se ha realizado durante miles de años. Podemos remontarnos al año 4000 aC, cuando la fermentación y la maltería eran los pilares en Mesopotamia. Además, los criadores de animales han seleccionado durante mucho tiempo rasgos particulares deseables, como el tamaño o el temperamento.

Sin embargo, con el advenimiento de las tecnologías genéticas, los científicos ahora están recortando genes de microbios, plantas e incluso animales a través de la tecnología de enzimas de restricción y empalándolos en el genoma de la planta con el fin de crear nuevos rasgos como resistencia a herbicidas o insectos. Por lo tanto, la transgénia también se conoce como tecnología de ADN recombinante (rDNA), o bioingeniería.

Los transgénicos en España:

Lo cierto es que en España también tenemos alimentos que son modificados geneticamente y de hecho en 2011 aumentó el porcentaje, siendo el maíz y la patata, los dos alimentos en los que está más presente esta técnica.

Aunque la ley europea obliga a identificar los productos que deriven de cosechas transgénicas, lo cual es un paso fundamental para poder elegir productos que no tengan este tipo de manipulación, cabe añadir que este tipo de alimentos también pueden entrar en nuestra alimentación a través de los piensos utilizados para ciertos animales.

Puede ser entonces que la  carne, la leche o los huevos que consumimos provengan de animales alimentados con transgénicos puesto que la legislación vigente no obliga a etiquetar el producto final.

España, en la actualidad, es el país de Europa que tolera los transgénicos a gran escala, cuyos cultivos encontramos especialmente en Aragón y Cataluña, dónde prácticamente se divide el cultivo a partes iguales entre las dos comunidades por lo que son muchas las personas y asociaciones que se oponen a ello, aunque repito que este tipo de alimentos ha aumentado en los últimos años en nuestro mercado (tenemos ejemplos claros en el cultivo del maíz Mon 810) y sólo el año pasado se cultivaron  cerca de las 98.000 hectáreas de maiz transgénico.

También Andalucía es un foco de cultivos transgénicos en España,  por lo que desde hace varios años y ante la  creciente problemática en os que están envueltos, se convocan  diferentes organizaciones a través de la Plataforma Andalucía Libre de Transgénicos (PALT)y que organiza diversas jornadas informativas y de acción.

Ventajas y desventajas de los alimentos transgenicos

Los alimentos transgénicos están en nuestras vidas. Los consumimos a diario, incluso cuando somos conscientes de ello de modo que vamos a ver qué ventajas tiene el consumo de este tipo de alimentos modificados, y también como no, qué desventajas tienen y como nos pueden afectar.

Alimentos transgenicos ventajas desventajas

Ventajas de los alimentos transgénicos

Es diícil o incorrecto decir que los alimentos trangénicos tienen ventajas claras, si bien al tratarse de una manipulación genética es evidente que tendrán consecuencias o efectos secundarios.

Sin embargo los que defienden esta manipulación y de hecho este tipo de alimentos, alegan que por ejemplo las semillas modificadas reducen significativamente el consumo de recursos, que necesitan menos agua, menos energía, menos trabajo y que esto hace que se produzca un aumento de la productividad y que con la situación actual de crisis que se vive, sobretodo en España, es del todo recomendable.

La manipulación genética y el “éxito” de que se consiga el modificar alimentos hace que muchos lo vean como un auténtico avance no sólo químico o biológico, sino también social y que se relaciona directamente con el hecho de evolucionar.

Entre las ventajas más concretas de los alimentos trangénicos podemos señalar:

  • Mejor sabor, nutrición y calidad
  • Mayor beneficio para los productores
  • Resistencia a virus e insectos
  • Tolerancia a los herbicidas
  • Aumento de la producción de alimentos para aliviar el hambre en el mundo

Desventajas de los alimentos transgénicos

De todos modos, al margen de lo que se consiga con este tipo de alimentos, es evidente (ya que se han publicado varios estudidos al respecto) que los alimentos transgénicos suponen un riesgo para la salud y además  un riesgo para el medio ambiente.

Ecologistas, asociaciones de derechos del consumidor, algunos científicos y políticos ya han denunciado este tipo de alimentos ,además de pedir que siempre se etiqueten y regulen aquellos que han sido modificados o que cuentan con componentes de origen transgénico.

Desde la OMS, organización mundial de la salud, se ha llegado a la conclusión de que este tipo de alimentos no suponen un riesgo directo a nuestra salud, aunque advierten de que cada alimento tratado geneticamente debe analizarse por si existe amenaza para la salud.

De hecho muchas organizaciones denuncian que la ingesta de este tipo de alimentos ya ha demostrado , en ratas de laboratorio, que supone un riesgo para los órganos internos.

En cuanto al medio ambiente cabe mencionar que muchos grupos ecologistas, como Greenpeace han evaluado que este tipo de alimentos incrementan el uso de tóxicos en la agricultura, la pérdida de biodiversidad, los riesgos sanitarios no están evaluados, etc…

Los cultivos genéticamente modificados a menudo se rocían con potentes pesticidas y herbicidas y se fertilizan con fertilizantes químicos. Estos productos químicos luego contaminan el medio ambiente al viajar por el aire; se filtran en el suelo, donde terminan en fuentes de agua dulce. Las malas hierbas han comenzado a desarrollar una resistencia a algunos de estos productos químicos, lo que significa que en el futuro será más difícil controlar las plantas nocivas. El viento también transporta el polen de los cultivos genéticamente modificados a los campos agrícolas vecinos, donde el inventario de semillas se contamina en forma cruzada con polen modificado genéticamente. Con el tiempo, esto conduce a una reducción en la biodiversidad de las cepas de los cultivos.

Además, la introducción de material genético de una planta a otra puede dar como resultado la introducción de material alergénico de una especie a otra. Debido a que ciertas proteínas causan más reacciones alérgicas que otras, las personas con alergias graves saben qué alimentos evitar. Si los genes de esos alimentos se introducen en otros sin el etiquetado adecuado para advertir a las personas con alergias, podrían producirse reacciones alérgicas.

Los alimentos transgénicos mas usados

Para acabar con toda la información sobre los alimentos transgénicos, veamos cuáles son los más usados:

  • Soja: Hasta el 90% de la soja en el mercado ha sido modificada genéticamente para ser resistente a un herbicida llamado RoundUp . Esta mayor resistencia al herbicida permite a los agricultores usar más RoundUp para matar malezas. Sin embargo, esto no solo da como resultado un producto alimenticio genéticamente modificado, sino también un producto alimenticio cargado con más productos químicos.
  • Maíz: La mitad de las granjas que cultivan maíz están cultivando maíz transgénico. La mayor parte de este maíz se utilizará para el consumo humano. El maíz modificado genéticamente se ha relacionado con problemas de salud, incluido el aumento de peso y la alteración de órganos.
  • Aceite de canola: El aceite de canola se obtiene del aceite de colza. Se considera uno de los aceites químicamente más alterados que se venden en el mundo a pesar de todo lo que se dice de él como el “mejor aceite del mundo”, que en realidad, es el de oliva.
  • Algodón: Incluso el algodón ha sido modificado genéticamente para aumentar el rendimiento y la resistencia a las enfermedades. La mayor preocupación se relaciona con el aceite de algodón, que es un aceite de cocina o de freír de alto valor y, a veces, se usa para hacer margarina. El algodón originario de la India y China, en particular, se considera de mayor riesgo para la salud personal.
  • Leche: Una quinta parte de las vacas lecheras en un país como Estados Unidos recibieron hormonas de crecimiento para ayudarlas a crecer más rápido y aumentar su rendimiento. Estas hormonas se pueden encontrar en la leche producida por estas vacas. Se ha demostrado que estas hormonas de crecimiento actúan dentro del cuerpo humano.
  • Azúcar: Las remolachas azucaradas genéticamente modificadas se introdujeron en el mercado en 2009. Estas remolachas azucareras se han modificado para resistir a los pesticidas, de modo que se espera que a la larga tenga efectos secundarios en nuestra salud.
  • Aspartamo: El aspartamo es un edulcorante artificial utilizado en lugar de azúcar por muchas personas. Existe alguna pregunta sobre la seguridad del aspartame en el cuerpo, incluido su posible vínculo con ciertos cánceres. El aspartame se fabrica a partir de bacterias genéticamente modificadas.
  • Calabacín: El calabacín genéticamente modificado contiene una proteína tóxica que lo ayuda a ser más resistente a los insectos. Este insecticida introducido, se ha encontrado recientemente en la sangre humana, incluida la de mujeres embarazadas y fetos. Esto indica que parte del insecticida se está introduciendo en nuestros cuerpos en lugar de descomponerse y excretarse.
  • Calabaza amarilla: La calabaza amarilla también se ha modificado con las proteínas tóxicas para que sea resistente a los insectos. Esta planta es muy similar al calabacín, y ambos también se han modificado para resistir virus.
  • Papaya: Los árboles de papaya modificados genéticamente se han cultivado desde finales de la década de los 90. Estas papayas han sido modificadas para ser naturalmente resistentes al virus Papaya Ringspot, y también para retrasar la madurez de la fruta. Retrasando la madurez, los proveedores tienen más tiempo para enviar la fruta a los supermercados.

Estos son solo 10 de los alimentos transgénicos más comunes que se encuentran en el supermercado. Hay muchos otros actualmente en venta y se están cultivando para el mercado. Si quieres mantenerte alejado de los transgénicos, siempre debes estar atento a una etiqueta que indique que los alimentos son orgánicos o no.

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