Si te preocupa lo que comes cada día es bastante probable que te preguntes si, en realidad, los alimentos ecológicos u orgánicos son más seguros, más nutritivos, y en definitiva, más saludables en comparación con sus equivalentes producidos tradicionalmente. Y, si bien es cierto que encontramos una gran diferencia respecto a sus precios, ¿ocurre lo mismo cuando se trata de nutrición y seguridad?.

Aunque antes encontrábamos este tipo de alimentos en las tiendas especializadas en alimentos saludables (por ejemplo tiendas de dietética o herbolarios), en la actualidad podemos encontrar alimentos ecológicos y orgánicos en la mayoría de supermercados.

De hecho, los alimentos orgánicos han aumentado en popularidad en las últimas décadas, y especialmente en nuestro país en los últimos años.

Muchas personas piensan que los alimentos ecológicos son más seguros, más saludables e incluso más sabrosos que los alimentos normales. Mientras que otros opinan que son mejores tanto para el medio ambiente como para el bienestar de los animales.

¿Qué son los alimentos orgánicos y en qué se diferencia del alimento tradicional?

El término «ecológico» u «orgánico» se refiere al proceso de cómo se producen determinados alimentos. Así, los alimentos orgánicos se han cultivado sin el uso de químicos artificiales, hormonas, antibióticos u organismos genéticamente modificados.

Pero para que un alimento sea etiquetado como orgánico debe estar libre de aditivos alimentarios artificiales. Esto incluye no solo edulcorantes artificiales, sino también colorantes, saborizantes, conservantes y glutamato monosódico.

Los alimentos cultivados orgánicamente tienden a utilizar fertilizantes naturales durante el proceso de cultivo, como por ejemplo podría ser el caso del estiércol, que ayuda a mejorar el crecimiento de las plantas. Mientras que los animales criados orgánicamente tampoco reciben hormonas, sustancias químicas o antibióticos.

¿Los alimentos orgánicos son más saludables que los ‘normales’?

Si sueles comprar alimentos de este tipo, es bastante probable que coincidas con nosotros si te decimos que los alimentos orgánicos que se compran con más frecuencia son las frutas, verduras, granos y cereales, legumbres, productos lácteos, los huevos y la carne.

Se sabe, tal y como han demostrado distintos estudios publicados en los últimos años, que la agricultura orgánica ayuda a mejorar la conservación de las aguas subterráneas y a mejorar la calidad del suelo, mejorando el medio ambiente al reducir la contaminación.

Y, a su vez, también han encontrado ciertas diferencias nutricionales entre ambos tipos de alimento; es decir, entre el alimento orgánico y su comparación ‘normal’ o ‘tradicional’. Veamos.

Los alimentos orgánicos pueden contener un mayor número de nutrientes

La evidencia científica sugiere que los alimentos cultivados de forma orgánica pueden ser más ricos nutricionalmente hablando. Esto significa que podrían ser más nutritivos.

Posiblemente sea debido a la variación más natural que supone tanto la manipulación como la producción de este tipo de alimentos. No obstante, los resultados obtenidos por el momento han sido mixtos, así que se requieren más estudios para ofrecer una conclusión más evidente.

Los alimentos cultivados orgánicamente tienen más vitaminas, minerales y antioxidantes

Varios estudios, entre los que se encuentra uno publicado en el año 2011, han encontrado que los alimentos orgánicos, por lo general, suelen tener niveles más elevados de vitaminas (entre las que destaca la vitamina C), minerales (como el hierro o zinc) y antioxidantes naturales.

Se estima que incluso el porcentaje de antioxidantes alcanza un 69 por ciento más, en comparación con los alimentos normales.

Mientras que, otro estudio, encontró que tanto las bayas como el maíz cultivado de forma orgánica contenían un 52 por ciento más de vitamina C, y un 58 por ciento de antioxidantes naturales.

Además, otro estudio indicó que reemplazar frutas, verduras y cereales por su versión orgánica de manera más habitual en la dieta podría proporcionar antioxidantes adicionales, lo que equivaldría a comer entre 1 a 2 porciones más de frutas y vegetales al día.

Tanto la carne como los lácteos podrían tener un perfil graso más saludable

Algunos estudios, como por ejemplo uno publicado en el año 2016, encontró que tanto la leche orgánica como los productos lácteos orgánicos podían contener niveles más elevados de ácidos grasos omega-3, una grasa considerada como saludable por sus cualidades cardiovasculares. Además, también tenían una cantidad ligeramente más alta de vitamina E, hierro y carotenoides.

En el caso de la carne, una revisión de un total de 67 estudios científicos encontró que la versión orgánica tenía un nivel mayor de ácidos grasos omega-3, además de niveles ligeramente más bajos de grasas saturadas, en comparación con la carne convencional.

Menos químicos, hormonas y bacterias resistentes

Tanto si los alimentos orgánicos son más saludables o no, lo cierto es que muchas personas optan por comer orgánico para evitar sustancias químicas artificiales. Y es que, como ha demostrado otro estudio, consumir este tipo de alimentos ayudaría a reducir la exposición a residuos de pesticidas, así como bacterias resistentes a los antibióticos.

Dado que la agricultura orgánica no utiliza antibióticos en los animales, estos productos suelen contener niveles ligeramente más bajos de bacterias resistentes a los antibióticos.