Visita a la cueva de Lascaux y réplicas Lascaux IV y II
En pleno siglo XXI, el gesto de admiración que aparece en nuestras caras al ver las obras de los grandes artistas en las pinacotecas del mundo me lleva a preguntarme ¿qué cara pondrían nuestros antepasados de hace más de 20.000 años cuando vieran los toros, los caballos, los ciervos… pintados en las paredes de la cueva de Lascaux en la actual Francia? Ese grupo, seguramente muy selecto, de cromañones tuvo la suerte de ver la cueva original de Lascaux –cerrada al público para preservar sus pinturas desde 1963–. Nosotros, aunque “nos conformamos” con la visita a Lascaux IV –también visitamos Lascaux II hace años–, alucinamos.

La cueva de Lascaux original es, por el grado de conservación y complejidad de sus obras, una de las grandes maravillas del arte parietal europeo. Esos toros, caballos y ciervos son de las pinturas rupestres más famosas del mundo. Y no creas que, por visitar Lascaux IV, una réplica, te vas a perder algo: está reproducida al 90% con una precisión milimétrica, nos lo contaron en 2015 cuando tuvimos la suerte de ver a los artistas trabajando en su creación. Es más, la visita a Lascaux IV, el Centre International d’Art Pariétal –Centro Internacional de Arte Rupestre–, es, además de más sencilla, todavía más completa que la de la cueva original para entender el contexto de las pinturas paleolíticas en Francia.
Desde el mirador al valle del Vézère hasta la sorpresa de ver un uro desde el tejado ajardinado del edificio, aquí tienes lo esencial para decidir cuándo ir, cómo organizarte y qué no perderte.
El cierre de la cueva de Lascaux original y sus réplicas: Lascaux II y Lascaux IV
La historia de Lascaux es la de un descubrimiento casual –cuatro jóvenes y el perro de uno de ellos, Robot, en 1940– que rápidamente pasó a ser foco de atención internacional. La cueva original, protegida por capas de arcilla y roca calcárea, se cerró de forma natural hace unos 10.000 años por un alud. Permaneció sellada hasta el siglo XX cuando la caída de un árbol, con sus raíces, abrió un hueco por el que se coló Robot.


Poco tardaron en llegar los visitantes, hasta 2.000 al día, que provocaron subida de temperatura, condensación y la aparición de musgos y hongos que dañaban los pigmentos de las pinturas rupestres. El 17 de abril de 1963, la cueva de Lascaux cerró sus puertas por protección –hasta el año 2000 se permitía la entrada de cinco personas al día–.
¿Sabías que…?
Tres tipos de enfermedades sufrió la cueva de Lascaux por la afluencia de visitantes. Enfermedad verde, con la aparición de musgo en las paredes; enfermedad blanca, calcita por la acumulación de CO2 al respirar, y enfermedad negra, hongos.
Las réplicas de Lascaux
Desde el cierre se han creado varias réplicas de la cueva de Lascaux y sus pinturas: Lascaux II, Lascaux III y Lascaux IV.
Lascaux II fue el primer facsímil de arte parietal del mundo. Creado en 1983, reproduce un 40% de la cueva original, principalmente la Sala de los Toros y la Galería. Todavía está abierta al público y, aunque es mucho menos impresionante y completa, tiene la ventaja de que hay menos visitantes y la sensación es más personal. Nosotros la visitamos en 2015.
¿Sabías que…?
Entre 1952 y 1963, el abate André Glory se dedicó a calcar las paredes de la cueva original de Lascaux. Monique Peytral se basó en ellos para reproducir al detalle y con unas técnicas parecidas a las que usaron en su momento la Sala de los Toros y la Galería en Lascaux II.
La segunda réplica, Lascaux III, es una exposición itinerante que ha dado la vuelta al mundo varias veces.
En la última, Lascaux IV, de 2016, se ha reproducido el 90% de la cueva de Lascaux –solo se han dejado fuera los espacios inaccesibles de la cueva original– con total precisión. Cuando visitamos Lascaux II, tuvimos la fortuna de entrar en el taller donde los artistas estaban trabajando en los paneles de Lascaux IV y damos fe del detalle y el mimo con que lo hacían. Además de la réplica, el Centro Internacional de Arte Rupestre es mucho más: exposiciones temporales, salas inmersivas y un montón de recursos educativos que hacen que la experiencia sea todavía más completa.


El edificio de Lascaux IV, proyectado por arquitectos noruegos, está perfectamente integrado en la colina: su fachada evoca una falla geológica y los techos verdes con gramíneas lo conectan con el paisaje tradicional de la región. Desde el tejado-mirador nos sorprendió ver un uro en el jardín: un guiño visual que conecta el exterior con lo que nos esperaba dentro.
Dónde está la cueva de Lascaux y cómo llegar
Lascaux se encuentra en Montignac, en el valle del Vézère, una de las zonas más ricas en cuevas prehistóricas no solo del Périgord y de Francia, sino de todo el mundo. El entorno es espectacular: desde el tejado-mirador hay vistas al valle y a las colinas que lo rodean cubiertas de bosques. Bosques que, hace miles de años, no estaban ahí: el paisaje era más abierto, tipo estepa siberiana, con musgos, líquenes y arbustos bajos. Si consigues “borrar” los árboles, podrás imaginar uros, bisontes, rinocerontes lanudos, leones de las cavernas… paseando por la zona tal y como los vieron y representaron nuestros antepasados en las pinturas rupestres.


Llegar al Centre International d’Art Pariétal es muy sencillo. Si vas en coche, solo tienes que seguir las indicaciones de Google Maps, está bien ubicado, el aparcamiento es gratuito. La línea de autobús Sarlat-la-Caneda – Périgueux tiene parada en Lascaux IV –aquí tienes los horarios–. Para los más activos, también es posible llegar en bicicleta, hay aparcamiento y puntos para recargar.
Precios, horarios y reserva de entradas de Lascaux IV
Antes de nada, Lascaux IV, a pesar de su tamaño, también tiene limitaciones de aforo para preservar la experiencia y gestionar las visitas guiadas en varios idiomas. Así que, reserva tus entradas a Lascaux IV con antelación.


Los horarios de Lascaux IV varían en función de la temporada. La apertura va de las 8:00 –del 28 de julio al 22 de agosto– a las 10:00 –del 3 de noviembre al 6 de abril–, pasando por las 8:30 y las 9:00. El cierre cambia de las 22:00 –del 28 de julio al 22 de agosto– a las 18:00 –del 3 de noviembre al 6 de abril–, pasando por las 21:30 y las 19:00. De primeros de enero a primeros de febrero cierra varias semanas por mantenimiento. Confirma el horario el día de tu visita en la web oficial. Ten en cuenta que el último acceso es dos horas antes del cierre.
El precio completo de la entrada a Lascaux IV es de 23 €, los menores de 5 años entran gratis y entre 5 y 12 años pagan 15 €. Puedes comprar una entrada combinada para Lascaux IV y Lascaux II por 29 €.
Visitas con audioguía y visitas guiadas en castellano
A la hora de comprar tu entrada a Lascaux IV, verás la opción de visita guiada en castellano, aunque no siempre estará disponible –el número de guías que hablan castellano es limitado–. Si no es posible, siempre puedes seleccionar la visita con audioguía en castellano. Se hace con una tablet interactiva y, por lo que vimos –nosotros hicimos la guiada– es muy entretenida.


La visita al Centro Internacional de Arte Rupestre
El recorrido de Lascaux IV combina la réplica de la cueva —recreada con materiales modernos, fibra de vidrio y resinas para conseguir textura y tacto— con un recorrido museográfico que explica la técnica, los pigmentos y el contexto arqueológico del arte rupestre en Dordoña.
La visita comienza por arriba, por el tejado-mirador al valle del Vézère donde imaginar la fauna de la prehistoria en el Périgord: bisontes, uros y leones de las cavernas, en esa estepa siberiana con musgos y líquenes que hoy es un tupido bosque.


Pero es lo que encontramos dentro lo que nos voló la cabeza, y eso que ya habíamos visitado Lascaux II. El arte de nuestros antepasados sobrecoge por sus más de 20.000 años de antigüedad, pero, si nos dijeran que lo pintaron la semana pasada, también nos quedaríamos sin aliento por su belleza, sus colores tan vivos y la manera en que los artistas aprovecharon las formas de la roca para dar volumen a los animales.
¿Sabías que…?
Los artistas de Lascaux crearon sus colores a partir de pigmentos minerales –por eso es tan complicada la datación, el Carbono 14 no sirve– como hematita, óxido de hierro, manganeso… Y las técnicas que utilizaron incluyen pinceles, soplado y dedos.
No solo eso, también hay amagos de perspectiva, de profundidad y de técnicas avanzadas como la anamorfosis que consiste en crear imágenes visibles solo desde un punto de vista concreto.
La Sala de los Toros
La cueva de Lascaux empieza por todo lo alto, con la Sala de los Toros. Aquí está la imagen más grande arte parietal, en cueva, de Europa occidental: un enorme toro negro de unos ¡5,60 metros de largo! El ejemplo perfecto de las pinturas paleolíticas en Francia. Junto a él, varios uros, caballos, ciervos, bisontes… y el conocido como unicornio. Una representación con cabeza de león de las cavernas, manchas de pantera, vientre dilatado y patas traseras que parecen humanas. Obviamente, es un animal fantástico, no es algo que se extinguiera en su momento.


En algunos momentos del año, la luz llegaba aquí por la entrada original por la que accedieron nuestros antepasados cromañones. Lo que hace especial esta sala, además de la cantidad y la calidad de las imágenes, es que todas pueden ser admiradas sin necesidad de moverse.
La Galería
Una cabeza de bisonte rojo guió nuestros pasos hacia la Galería. Allí nos esperaban un gran ciervo, caballos, más toros negros, cabras montesas y hasta una vaca que parece saltar de una pared a otra.


Al final de la Galería nos encontramos con la figura de un caballo invertido. Lo que nos dejó totalmente alucinados es que es imposible verlo por completo debido al giro de la piedra. Ni lo podemos ver nosotros, ni quién lo pintó. Aún así, tiene las mismas proporciones que los demás caballos de la cueva, ¡una proeza artística!
Zonas no replicadas
No te vas a quedar con las ganas de ver parte de ese 10% que no está replicado en Lascaux IV. Fuera de la “cueva” hay paneles donde se reproduce la escena del Pozo, de las más enigmáticas del arte parietal europeo, con la única representación antropomorfa de todo el conjunto, un humano con cabeza de pájaro, junto a un rinoceronte lanudo.


En esa zona también vimos una maqueta de la cueva, con la que nos hicimos una idea del espacio original, y ampliaciones de algunos paneles concretos.


No está reproducida la Galería de los Felinos, la única parte de la cueva de Lascaux original que no podrás ver en Lascaux IV.
El resto de espacios de Lascaux IV
El Centro Internacional de Arte Rupestre no es solo la réplica. Entre los espacios que visitamos y recomendamos están:
- la galería del imaginario y salas con obras de arte contemporáneo inspiradas en el arte parietal, incluidos los toros de Picasso;
- exposiciones temporales sobre ciencia y fotografía;
- una sala inmersiva con recursos multimedia;
- talleres y actividades educativas.


La visita a Lascaux II
Antes de la apertura de Lascaux IV, en 2016, visitamos Lascaux II. La experiencia fue distinta. Como hemos comentado, Lascaux II solo reproduce la Sala de los Toros y la Galería, además de no ser totalmente fidedigna con las alturas y anchuras de los espacios para facilitar la visita. Fue la primera solución para que el público pudiera conocer el arte rupestre en Montignac sin dañar la cueva original. El primer facsímil de arte parietal del mundo.


Si te animas, puedes combinar las dos y comparar la evolución de las técnicas de replicado, además de tener una visita más tranquila, con menos gente a tu alrededor.
Preguntas y respuestas sobre la visita a la cueva de Lascaux
¿Cuántos años tiene la cueva de Lascaux?
Al ser los pigmentos de las pinturas minerales, no es posible utilizar el método de datación del Carbono-14. Pero se encontró una lámpara con hollín de enebro datado hace 21.500 años, el periodo Magdaleniense. Así que, las pinturas tienen unos 21.500 años de antigüedad, hito del arte rupestre en Dordoña.
¿Cuál es la diferencia entre Lascaux II y Lascaux IV?
Lascaux II es un facsímil parcial mientras que Lascaux IV ofrece una reproducción más amplia, más precisa y un centro interpretativo.
¿Quién descubrió la cueva de Lascaux?
Fue descubierta en 1940 por Robot, el perro de Marcel, un aprendiz de mecánica de Montignac. Él y sus tres amigos fueron los primeros que entraron en la cueva de Lascaux en miles de años.
¿Cuánto dura la visita a Lascaux IV?
Teniendo en cuenta que el último acceso es dos horas antes del cierre, no recomendaríamos menos de esas dos horas. Nosotros estuvimos tres…
Lascaux y Altamira, ¿cuál es más antigua?
Tanto Lascaux como Altamira son Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Lascaux es la más antigua, unos 21.500 años por los 14-15.000 de Altamira.
¿Cuántas pinturas hay en Lascaux?
Centenares de figuras: uros, bisontes, caballos, ciervos y signos abstractos.
¿Cuáles son los horarios de apertura?
Varían según temporada; consulta la web oficial.
¿Cuál es la figura más grande de la cueva de Lascaux?
En la Sala de los Toros hay un toro de 5,60 m de longitud. La representación de arte parietal más grande de la cueva y de toda Europa occidental.
¿Hay seres humanos representados?
Sí, la escena del Pozo de Lascaux muestra un hombre con cabeza de pájaro.


Llamar a la cueva de Lascaux Capilla Sixtina del Paleolítico es un error… Tal vez la Capilla Sixtina se tendría que llamar cueva de Lascaux del Renacimiento.
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