Varsovia tiene un centro histórico declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, su famosa Ruta Real llena de palacios con siglos de historia, grandes museos, el encanto de la Navidad por un lado y de los paseos veraniegos por las pasarelas del Vístula por el otro… Pero hoy venimos a hablarte de otra Varsovia, de una Varsovia alternativa, algo menos conocida por los turistas y más frecuentada por los locales.

Entre nuestros 9 rincones de la Varsovia alternativa encontrarás un jardín “escondido”, rascacielos, edificios comunistas convertidos en bares, el menos conocido de los palacios de la Ruta Real y muchos edificios industriales de la época soviética hoy espacios gastronómicos, de ocio y museos un poco menos clásicos.

Si quieres conocer una Varsovia alternativa, diferente y moderna, completamente integrada en el siglo XXI, te llevamos a ella.

1. Los jardines de la azotea de la biblioteca de la Universidad de Varsovia

Empezamos nuestro recorrido de rincones de la Varsovia alternativa en pleno centro de la capital polaca, muy cerca de los bulevares del Vístula, parada obligada si visitas la ciudad en verano. Nos vamos a la BUW, Biblioteka Uniwersytecka w Warszawie en polaco, para los no iniciados Biblioteca de la Universidad de Varsovia. El edificio en sí ya es curioso, con su hormigón visto, su cristal verde y su fachada en parte morada y en parte cubierta de vegetación. Dentro, además, puedes visitar la Galería del Cartel Polaco, con posters originales de la época comunista: políticos, de cine, de teatro, etc.

Pero lo más curioso, y para nosotros uno de los rincones más bonitos de Varsovia, es la azotea de la biblioteca, con sus jardines en altura. Un pequeño jardín “secreto” –es muy poco secreto ya– que en verano es punto de encuentro para estudiantes, locales y turistas. Además, podrás ver la biblioteca desde arriba gracias a su techo acristalado y disfrutar de bonitas vistas a la ciudad.

Los jardines abren de abril a octubre. Tienes los horarios en la web de la Biblioteca de la Universidad de Varsovia.

2. El espacio de la antigua Central Eléctrica Powiśle

Nos quedamos en el centro de Varsovia, de hecho, no nos alejamos mucho. Seguimos en las riberas del Vístula, para ir hasta la Elektrownia Powiśle, la antigua Central Eléctrica Powiśle. Verás que la mayoría de nuestros rincones de la Varsovia alternativa son antiguas fábricas o instalaciones industriales. Y es que nos encanta cómo les han dado una nueva vida. En este caso, hablamos de la primera central eléctrica de Varsovia, que se construyó en 1904 y estuvo en funcionamiento durante casi un siglo, hasta los años ‘90 del siglo XX. Durante la Segunda Guerra Mundial se redujo en escombros, pero después se reconstruyó y retomó su actividad.

Hoy en día la antigua sala de calderas y la sala de máquinas se han convertido en una especie de centro comercial donde se realizan un montón de actividades. Hay un mercadillo ecológico viernes y sábados, pista de hielo en Navidades, cine de verano en su patio, exhibiciones, espectáculos de luz y sonido, etc. Y también hay un Food Hall con restaurantes y bares de todo tipo. Nosotros cenamos allí fenomenal, en la terraza del DOCK19 con vistas al Vístula –eso sí, es un poco carillo para los estándares polacos–.

Aunque no vayas a comer, merece la pena darse un paseo por el edificio buscando los vestigios de su pasado industrial: chimeneas, el hueco del antiguo ascensor usado para mover el carbón, la estructura de acero que soporta el techo, cuadros eléctricos antiguos…

En su web puedes conocer más de su historia y consultar sus horarios.

3. La Soho Factory y el Museo del Neón en el barrio de Praga

Nos vamos del centro y cruzamos el Vístula hasta el barrio de Praga. No te preocupes, salimos del centro pero no de Polonia. Así, Praga, se llama uno de los barrios con más historia de la capital polaca. Y también uno de los más auténticos y, al mismo tiempo, bohemio y moderno. Si te gusta el arte urbano, es tu sitio. A nosotros nos gustó tanto que hasta le hemos dedicado un artículo: 9 lugares que ver en el barrio de Praga de Varsovia.

Uno de ellos es la Soho Factory. Los edificios en ladrillo visto de la zona industrial del barrio de Praga acogieron en su día tres fábricas: una de yute, una de munición –llamada Pocisk– y una de motos y scooters –de las marcas Osa y SHL–. ¿Ahora? Pues hay oficinas, tiendas de diseño y, una vez más, restaurantes. Nosotros comimos el menú del día del Warszawa Wschodnia y estuvo genial –por cierto, es del mismo cocinero que el DOCK19, Mateusz Gessler–.

En el recinto de la Soho Factory, en un antiguo almacén, está también el Museo del Neón, uno de nuestros museos de Varsovia favoritos, con sus más de 200 neones antiguos.

4. El Centro Koneser con su antigua fábrica de vodka

Seguimos en el barrio de Praga y nos vamos a otro antiguo recinto industrial. En este caso, a los edificios neogóticos de ladrillo rojo de la antigua fábrica de vodka Koneser, que se remontan a finales del siglo XIX –1895-1897–. En el complejo había, en realidad, dos empresas diferentes: Rektyfikacja Warszawska y Warszawski Skarbowy Skład Win. La primera, Rectificación de alcoholes de Varsovia, era privada, y la segunda, Bodegas de Varsovia, pública. Las dos juntas formaron uno de los mayores complejos industriales dedicados a la producción de vodka en el Imperio Ruso antes y de la zona de influencia de la URSS después –cerraron en los años ‘70 del siglo XX–. Además, en 1923, junto a ellas se abrió la ceca estatal polaca.

Todo el complejo se ha convertido en un centro cultural lleno de eventos y también, una vez más, en centro comercial con galerías de arte, tiendas de moda, bares, restaurantes, etc. Además, en las antiguas naves industriales podrás visitar el Muzeum Polskiej Wódki, Museo del Vodka Polaco y probar vodka. Nosotros no bebemos y no hemos visitado el museo, pero allí está. Ah, ¡en invierno también hay pista de hielo en el patio!

En la web de Koneser puedes conocer su historia y consultar sus horarios.

5. El Castillo Ujazdowski y su Centro de Arte Contemporáneo

Nos olvidamos un poco de los edificios industriales y volvemos a cruzar el Vístula y a recorrer zonas más conocidas de la capital polaca. Vamos a uno de sus parques más grandes y famosos, el Parque Real Łazienki, en plena Ruta Real. Nosotros lo habíamos visitado en un par de ocasiones y no fue hasta la tercera cuando nos acercamos al Zamek Ujazdowski. Hablamos de un castillo, más bien palacio, mandado construir en el siglo XVII por el rey Segismundo III Vasa como residencia de verano.

¿Un palacio del siglo XVII como rincón alternativo de Varsovia? Sí, nos atrevemos a incluirlo en nuestra lista por dos razones. La primera, porque creemos que es bastante desconocido, y las vistas del palacio al fondo de Kanał Piaseczyński son preciosas, así que no deberías perdértelas. Y la segunda es que hoy acoge el Centro de Arte Contemporáneo de Varsovia, con exposiciones muy interesantes para los amantes del arte contemporáneo. Además, en los jardines de alrededor en verano hay muchos eventos y ¡ponen hamacas!

En su página oficial puedes consultar los horarios y precios del Centro de Arte Contemporáneo del Castillo Ujazdowski. El jueves es gratuito.

6. La fábrica Norblin: ¡más recuperación industrial!

Seguimos recorriendo la capital polaca y nos vamos a uno de nuestros barrios favoritos: Wola. Nuestro siguiente rincón alternativo de Varsovia es… sí, lo has adivinado, otro antiguo complejo industrial. En este caso el de Norblin, Bracia Buch i T. Werner, que estuvo en marcha durante un siglo justo: desde 1882 –cuando lo adquirieron sus dueños, o sea que ya llevaba años en funcionamiento con otro nombre– hasta 1982. Al principio era una fábrica de platería, pero tras la Segunda Guerra Mundial se convirtió en una planta de laminación de metales: Walcownia Metali Warszawa.

Antes de su “nueva transformación” fue sede del Museo de la Industria, del Museo de las Artes Gráficas y de un teatro, entre otras cosas. Ahora es una zona de oficinas y, una vez más, un centro comercial. Pero lo más curioso es que todo el complejo, con sus diez edificios históricos, una cincuentena de máquinas y aparatos, hornos y vagonetas originales –algunos carros se han convertido en bancos–, las vías de tren, una gran colección de platería Norblin con piezas producidas en su día aquí, etc. es un museo. Casi dos hectáreas de museo gratuito con piezas expuestas aquí y allá. Y también hay una terraza mirador con bonitas vistas de Varsovia.

Aquí puedes ver los horarios del Museo de la Fábrica de Norblin.

7. La antigua cervecería de Varsovia: ¡sí, también es un centro comercial!

La última ex fábrica, lo prometemos. Si hemos ido a una antigua fábrica de vodka, no podía faltar una de cerveza polaca, ¿no? Dicho y hecho, seguimos en el barrio de Wola y nos vamos a la Browary Warszawskie, la antigua Fábrica de cerveza de Varsovia. En 1846 el maestro cervecero Haberbusch y el panadero Klawe compraron en subasta una cervecería. Pocos años después, otro cervero, Schiele, se incorporó al negocio. Así nació “Haberbusch i Schiele”, la que se convertiría en una de las mayores productoras de cervezas de toda Europa. En época comunista fue nacionalizada y siguió abierta hasta principios del siglo XXI, hasta 2005.

Ahora acoge viviendas, oficinas, y, lo que nos importa a nosotros: muchos restaurantes y bares donde comer bien y, por supuesto, beber buena cerveza. Todavía sigue habiendo una pequeña fábrica de cervezas artesanales llamada igual, Browary Warszawskie. Allí comimos nosotros y aseguramos que, aunque no bebemos cerveza, la comida estaba muy rica.

Puedes conocer más de la historia del sitio y sus espacios en la web de Browary Warszawskie.

8. El barrio de Wola: la city de Varsovia

Como hemos dicho, el barrio de Wola es uno de nuestros favoritos. Aquí encontrarás algunas visitas “clásicas” de la ciudad, al fin y al cabo es donde estaba el gueto judío, del que quedan algunos vestigios. En Wola empezó el Alzamiento de Varsovia, al que está dedicado el Museo del Alzamiento de Varsovia. Durante años este barrio estuvo olvidado, un poco como le pasó al de Praga, pero ahora está de moda. Hay mucho arte urbano, y en esto se parece a Praga, pero también una característica muy suya: rascacielos y muchos otros edificios contemporáneos.

La parte oriental del barrio, la más cercana al centro, se ha convertido en la city de Varsovia. Aquí es donde, en 2022, se coronó la Varso Tower, el edificio más alto de Polonia y de toda la Unión Europea, con sus 310 metros de altura hasta la punta de la aguja. Otros rascacielos emblemáticos son el de la Warsaw Unit, el Skyliner y el Warsaw Spire. Este último está ubicado en la Plac Europejski, uno de los rincones más “instagrameables” de Varsovia, con sus fuentes, sus murales y su letrero “Kocham Warsaw”, Quiero a Varsovia.

9. Un salto al pasado comunista de Varsovia

Acabamos nuestros rincones alternativos de Varsovia volviendo al centro y dando un salto al pasado comunista de la ciudad. Por supuesto, puedes hacerlo visitando el Palacio de la Cultura y la Ciencia, otro de los edificios más altos de la ciudad, aunque mucho más antiguo que los rascacielos de Wola. Pero aquí no hablamos de clásicos sino de sitios diferentes. Por eso, nos vamos al Museo de la Polonia Comunista, donde viajamos en el tiempo hasta la Polonia de la posguerra y de los años del Telón de acero. ¿Cómo era el día a día de los varsovianos en esa época? ¿Cómo eran sus casas? ¿Su trabajo ¿Sus hobbies? ¿Sus bares de leche? Aquí lo descubrirás.

El museo está en la Plac Konstytucji y no muy lejos, cerca de la Rotonda de Charles de Gaulle, hay otro edificio de origen comunista mucho menos conocido que el Palacio de la Cultura y la Ciencia. Hablamos del antiguo edificio del Dom Partii –literalmente, Casa del Partido–. La sede del Comité Central del Partido Comunista Polaco inaugurada en 1952 en un original estilo modernista, aunque no lo parezca. Más adelante, se convertiría en Bolsa de Valores de Varsovia –¡vaya cambio!– y ahora hay un centro de conferencias y oficinas, pero también acoge a dos de los bares más de moda de la ciudad:  el Cuda, especializado en cerveza, y el Zamieszanie, con sus cócteles en botellas y su techo decorado con esas mismas botellas. Muy cerca hay otro bar que está muy de moda: el Zagrywki, con su beer pong, karaoke y hasta un minigolf.

Mapa de nuestros rincones de la Varsovia alternativa

Aquí tienes un mapa con nuestros 9 rincones de la Varsovia alternativa para que los ubiques y mires cuáles te pillan cerca de tu recorrido por la ciudad, que imaginamos que no los visitarás todos de una vez…

Varsovia es sus grandes museos, su casco histórico, su Ruta Real, pero también es esta. Hay una Varsovia diferente, ¡solo tienes que ir a buscarla!