10 julio 2023

Pedimos el apoyo a una Directiva de Edificios de la UE (EPBD) ambiciosa y socialmente justa

En vísperas del primer Consejo Europeo Informal que se celebrará bajo la nueva Presidencia española de la UE en Valladolid, las organizaciones de la sociedad civil, las ONG sociales y medioambientales, los sindicatos y el mundo académico en España pedimos a través de esta carta abierta a sus representantes electos que apoyen una Directiva de Edificios de la UE (EPBD) ambiciosa y socialmente justa. Este llamamiento a la acción ya ha sido respaldado por más de 50 organizaciones de toda Europa, y que tiene el potencial de sacar a millones de hogares españoles y europeos de la pobreza energética en medio de la crisis económica actual y, a su vez, mejorar la salud de todos en nuestros hogares.

En 2022, las cifras publicadas por Eurostat revelaron que casi 8 millones de personas en España no podían mantener a una temperatura adecuada sus hogares. El 80% de los edificios españoles son ineficientes desde el punto de vista energético, un 5% más que en la UE. El Plan Nacional contra la Pobreza Energética constató que son sobre todo los hogares de las personas más vulnerables en España los que sufren esta ineficiencia.

A pesar de que millones de personas residen en viviendas inadecuadas, durante décadas no se ha hecho prácticamente ningún esfuerzo para desarrollar y aplicar políticas de construcción de edificios de la UE inclusivas y ambiciosas que pudieran apoyar la renovación energética de los edificios ineficientes.

Es crucial que los nuevos gobernantes de nuestro país apoyen una directiva europea sobre edificios ambiciosa y socialmente justa que mejore la eficiencia energética y calidad de las viviendas de los españoles, redundando en su salud y bienestar, y que a su vez reduzca sus facturas de energía, mejorando su economía doméstica. Si así lo hacen, desbloquearán millones en fondos de recuperación que pueden utilizarse para renovar los hogares más ineficientes y sacando a millones de personas de la pobreza energética.

Debe asignarse una financiación tanto nacional como a nivel europeo adecuada y suficiente para renovar las viviendas con peores condiciones en cuanto a su nivel de eficiencia energética, así como los hogares con ingresos más bajos y descarbonizar sus necesidades de calefacción y refrigeración. Esto puede lograrse a través de un ambicioso y claro marco regulador de la UE para los edificios, que debería aplicarse con fuertes salvaguardas sociales a nivel nacional y local, por el bien de las personas y de la justicia climática.

Mejores edificios hoy pueden llevar a mejores vidas mañana. Muchos hogares están sufriendo las consecuencias de la inacción política, con la crisis económica y los precios de la energía en máximos históricos. El uso continuado de combustibles fósiles pondrá en peligro más vidas y provocará que más hogares caigan en la pobreza energética. Crear ahora hogares más eficientes energéticamente puede ahorrarnos energía y dinero, protegiendo el derecho a un entorno vital adecuado y saludable para todos.