El Mont Saint Michel (Le Mont Saint Michel) es una de las joyas monumentales de un país ya de por si rico en monumentos como es Francia. Este pequeño pueblo situado en un promontorio rocoso de 92 metros de altitud está ubicado en aguas del Océano Atlántico, en la región de la Baja Normandía y departamento de la Mancha. Es la frontera natural con la vecina región de la Bretaña y de hecho ha sido escenario de disputas entre bretones y normandos y también ingleses.

Mont St. Michel

Historia del Mont Saint Michel

Cuenta la leyenda que el Arcángel San Miguel se apareció ante el Obispo de Avranches Aubert y le instó a que construyese un oratorio en lo que antes se llamaba Mont Tombe. Ante las dudas del religioso sobre la veracidad de su visión se le volvió a aparecer, esta vez poniéndole el dedo en la cabeza, ante lo cual el Obispo ya no dudó y construyó la capilla que fue objeto de peregrinación a partir del s.VIII.

En estos primeros tiempos seguramente un maremoto provocó que la capilla encima del promontorio quedará aislada de tierra firme aunque los peregrinos seguían acudiendo cuanda bajaba la marea.

El esplendoroso aspecto actual de estilo gótico flamígero se debe a unos monjes benedictinos de la época posterior a la Guerra de los Cien Años.

La maravillosa estampa de la abadía y su situación la convierten en uno de los lugares más visitados de Europa con más de 3 millones de visitas al año. Estamos ante un lugar con una mística especial, de una belleza sobrecogedora máxime si vamos en un día en que la marea sube, dato a tener en cuenta a la hora de visitar este increible lugar.

Vista nocturna del Mont Saint Michel

Actualmente una carretera llega hasta el Mont Saint Michel salvando las peligrosas mareas, eso ha hecho que el famoso islote apodado la octava maravilla haya perdido un poco de encanto, aunque las hordas de gente y coches buscando aparcamiento no son suficientes para no quedar embelesados ante el mito.

En un intento de recuperar el primigenio espíritu de los peregrinos está previsto que se sustituya la carretera por un puente con lo cual se eliminarán los vehículos y los atascos de St.Michel y se recuperaría en su totalidad su encanto original. La obra es un proyecto muy costoso y del cuál podéis informaros en este enlace: http://www.projetmontsaintmichel.fr/index.html

A fecha 2023 este proyecto ya hace años que existe y ya no hay los aparcamientos bajo las faldas de la abadía ni se puede llegar en coche. Actualmente solo se puede llegar en bus lanzadera desde el pueblo situado a 3 Km o en calesa de caballos o mejor aún andando para así poder ir haciendo inolvidables fotos de la abadía.

Entradas para el Mont Saint Michel

Os recomendamos encarecidamente comprar la entrada con antelación. En las taquillas se forman muchas colas y si lleváis la entrada antes ya podéis pasar directamente sin tener que hacer cola como el ganado. Consigue tu entrada al Mont Saint Michel

Si sois un grupo podéis reservar un tour guiado con una guía profesional. Un sitio como este merece que ser conocido en toda su magnitud: historia, curiosidades, anécdotas…

¿Qué hacer en el Mont Saint Michel?

Hay que empezar diciendo que no es una visita larga. Con una tarde es suficiente para pasear, hacer fotos y extasiarse ante este prodigio de la naturaleza y del hombre. Mi recomendación es llegar por la tarde, disfrutar de la aproximación a la abadía, paseando, haciendo fotos desde los márgenes de la carretera, etc… Con esto evitaremos a las hordas de turistas que llegan durante el día. No quiero decir que estemos solos pero si mucho mejor que por la mañana o a primeras horas de la tarde. Lo ideal es subir al atardecer, contemplar la bella puesta de sol y entrar en el recinto abacial anocheciendo cuando las estancias están levemente iluminadas y diferentes músicos van interpretando dulces y delicadas partituras.

1. Las Mareas del Monte Saint Michel

Las mareas de St.Michel

El fenómeno de las mareas se atribuyó durante los siglos previos al triunfo de la ciencia y la razón a diferentes motivos, como la providencia, a Dios o a la propia respiración del mar. Finalmente llegó Newton para aclarar conceptos y en su Teoría de la Gravitación Universal  lo atribuyó a la atracción combinada del sol y la luna (no deja de tener cierto romanticismo) que provoca que las masas de agua oceánicas se expandan. Hay que añadir que este fenómeno se intensifica en esta región de Francia por efecto de las potentes corrientes del Atlántico.

Vista del Mont Saint Michel desde un parking

Es muy imporante tener en cuenta que hay aparcamientos que quedan en los márgenes debajo de la carretera que quedan inundados por la marea. Unos paneles indican la hora en que ha de quedar vacío el parking para que la marea no se trague los coches. Aún así es curioso ver a la grúa llevándose el coche de algún despistado/a. Bien pensado, seguro que estos olvidadizos nunca se alegrarán tanto de pagar la grúa!

Las mareas de St.Michel

Aparte del peligro de las mareas, lo es más aún las arenas movedizas, no es broma, que existen. Hay que tener en cuenta que cuando la marea baja y el mar se retira quedan al descubierto más de 25.000 ha de cieno, arena, hierba y ríos. Es extremadamente peligroso y de hecho cada año hay que lamentar algún accidente mortal. Para pasear por estas zonas es imprescindible ir con un guía local.

2. El pueblo de Saint Michel

Por decirlo de alguna manera es una mezcla de tiendas de recuerdos y restaurantes que se reparten en el camino hacia la Abadía. La Grande Rué es la calle principal y con mas movimiento. Como he comentado anteriormente es una zona llena de gente y seguramente la menos atractiva de toda la visita.

3. Las murallas del Mont Saint Michel

Al contrario que las calles del pueblo, recorrer las murallas es algo que si se recuerda durante mucho tiempo. Las vistas de la bahía y del peñasco de Tombelaine son soberbias. Diferentes puntos permiten contemplar como la marea sube mientras se pone el sol. Sencillamente inolvidable.

La marea desde la muralla

4. La Iglesia Abacial de Le Mont Saint Michel

Si la Abadía es muy bella y fotogénica por fuera, también lo es por dentro. Durante el día está atestada de turistas pero a última hora de la tarde es mucho más agradable. Más recomendable aún es conteplar esta maravilla del gótico flamígero en una visita nocturna (julio y agosto). Las estancias del conjunto religioso están casi a oscuras, en la penumbra. en diversos sitios un violín, un arpa o un piano hacen este recorrido aún más inolvidable.

La iglesia abacial

Otras recomendaciones para visitar el Mont Saint-Michel

Así como la puesta de sol es inolvidable también lo es ver el Mont Saint Michel despertar con los primeros rayos de sol. Para ello recomendamos pernoctar en alguno de los pueblos que hay cerca del famoso peñasco. Dentro es muy caro y la calidad deja bastante que desear.

Otro consejo para los amantes de la fotografía es que llevéis un buen trípode. Generalmente hace mucho viento, por lo que es básico llevar material resistente para que las fotos no salgan movidas.

Para más información podéis acudir a la página oficial: http://www.ot-montsaintmichel.com/index.htm

El Mont Saint Michel es una de las maravillas del mundo actual y está en un entorno natural mágico ideal para disfrutar de unas vacaciones de verano,