El Medio Oriente está conformado por diversos países y ciudades que respiran historia en cada una de sus esquinas y calles, por lo que muchos turistas al momento de ir disfrutan de una experiencia única y enriquecedora en todos los aspectos.
Hoy queremos compartirte 4 ciudades que poseen diversos espacios espectaculares llenos de historia y que además son completamente diferentes, haciendo de la región un lugar único.
Petra
Mejor conocida como la capital imperial de los nabateos, es una de las ciudades antiguas del Medio Oriente que se encuentran intactas, y a su vez es considerada por muchos arqueólogos como una joya de la arquitectura mundial. Esta se encuentra localizada en el corazón del Medio Oriente y es considerada clave para el estudio de la forma de vida de las primeras civilizaciones poderosas de la antigüedad.
Petra se encuentra escondida dentro de las montañas de Jordania y su entrada corresponde con el templo de Ad Deir el cual aún se mantiene bien conservado en piedra arenisca, por lo que se puede observar que el trabajo del mismo ha sido extraordinario. También esta ciudad resguarda algunos de los tesoros más nutridos de comerciantes antiguos así como tumbas reales lo que la hace aún más atractiva.
Jerusalén
Es considerada la cuna del cristianismo y es otra de las ciudades misteriosas que el Medio Oriente les regala a sus turistas. Dentro de esta ciudad existen las tres religiones más importantes del mundo, por lo que Jerusalén es considerada un punto de equilibrio. Asimismo, es uno de los puntos políticos más controvertidos del mundo por su diversidad religiosa.
Otro de los puntos importantes dentro de esta ciudad es que se encuentra en los montes de Judea y se encuentra flanqueada por un desierto blanco mítico, el cual tiene sus asentamientos desde hace más de quinto milenio antes de nuestra era. También, posee la mezquita de la Roca, el Santo Sepulcro y el Muro de los lamentos.
El Cairo
El Cairo es una de las ciudades más antiguas del mundo, donde hace más de 5 mil años los primeros pobladores caminaron sobre su tierra, huyendo del desierto para conseguir tierras fértiles donde habitar.
Estos primeros habitantes se agruparon en regiones llamadas nomos, que con el tiempo se fueron unificando hasta crear lo que es el Alto y Bajo Egipto; pero no fue sino hasta el año 3.100 a.C que se unificaron en Menes donde entra el primer Faraón, con el que inició las primeras 30 dinastías que gobernaron Egipto.
La historia antigua de esta nación se divide en tres imperios y dos periodos intermedios, donde el imperio antiguo comprende el periodo entre el 2.635 y el 2.155 a.C y allí se desarrolla la dinastía III a la VI, donde reinaron los primeros ocho Faraones.
Sana’a
La ciudad de Sana’a es considerada una de las ciudades más hermosas, misteriosas y con gran riqueza histórica de todo el Medio Oriente. Con una trayectoria de más de 2 mil 500 años de antigüedad, esta ciudad se encuentra edificada a más de 2 mil metros sobre el nivel del mar.
Sana’a también es la capital histórica y política de la República del Yemen, lo cual está situada en la provincia o gobernación del mismo nombre. Ubicada estratégicamente en la ruta de Adén a La Meca, al pie de las montañas de Djebel Nogoum (2.892 m) y Djebel Ayban (3.194 m), en una meseta a 2.300 metros de altitud al noroeste del país.
Como dato histórico, para el año de 1986 la ciudad fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO ya que es un verdadero museo libre dentro de Yemen. Además, durante el siglo VII y VIII, Sana’a fue un centro importante de cultura para la religión islámica. Esto se debe a que las grandes masas de personas que recibió la ciudad en ese entonces, se convirtió en un pilar político del régimen musulmán.
