En la pequeña ciudad pirenaica de Vielha, la capital de la Val d’Aran, se concentra casi el 40% de la población de todo el valle. Llega al 55% si contamos con todo el municipio de Vielha e Mijaran. Así que está claro que es tu lugar si estás buscando comercios y servicios. Es el sitio ideal en el que hacer base para descubrir el resto del valle, también por su posición geográfica. Pero, no tengas prisa y no salgas tan rápido de la ciudad, que también hay unos cuantos lugares que ver en Vielha.

Las grandes avenidas, los nuevos barrios residenciales y pletas –las urbanizaciones aranesas– contrastan con las callejuelas del casco histórico, en la confluencia de los ríos Garona y Nere. Aquí encontrarás la mayoría de lugares que visitar en Vielha: iglesias, palacetes, museos… Y lo bueno es que, pasees por donde pasees, siempre te acompañarán las cumbres de más de 2.000 metros que rodean la ciudad. Si hace bueno y están despejadas, claro. También puedes ganar perspectiva y alejarte un poco para visitar los otros pueblos del municipio de Vielha e Mijaran, donde te esperan unas cuantas sorpresas.

Vamos a ello, aquí tienes nuestros imprescindibles: los 6 sitios que ver en Vielha. La capital de la Val d’Aran te espera.

1. La iglesia de Sant Miquèu de Vielha con el Cristo de Mijaran

Si hay un monumento que tienes que visitar en Vielha es la iglesia de Sant Miquèu. Es una de las etapas más importantes de la ruta del románico en la Val d’Aran, aunque con un mix de varios estilos y épocas. En el exterior, la portada principal, románico-gótica, tiene nada menos que cincuenta y nueve figuras entre las que está, cómo no, San Miguel –lo leímos, no nos paramos a contarlas, ¿eh? –. A la izquierda de la portada, fíjate en el curioso capitel con tres rostros y cuatro ojos… En lo que no hará falta que te digamos que te fijes es en la gran torre-campanario.

En el interior nos encontramos con una pila bautismal del siglo XII, el retablo de San Miguel del XV del llamado “maestro de Vielha”, un órgano de los siglos XVIII-XIX… Pero lo que íbamos a buscar era el Cristo de Mijaran. Que, ¿qué es el Cristo de Mijaran? Es la joya de la corona del románico de la Val d’Aran. Una talla del siglo XII que formaba parte de un conjunto escultórico más amplio, un Descendimiento del taller de Erill la Vall, en la Vall de Boí. La mano en el torso del Cristo es la de José de Arimatea. A pesar de que solo quede un fragmento del conjunto, se considera una de las piezas más importantes de la escultura románica catalana, ahí es nada. Nosotros nos quedamos un buen rato embobados fijándonos en sus detalles, la expresión del Cristo, su pelo, esa mano…

2. Las callejuelas del casco histórico en las riberas del río Nere

Ya dijimos que lo que tienes que ver en Vielha es básicamente su casco histórico. Se extiende en las dos riberas del río Nere y a los dos lados de la llamada arteria de Vielha: la carretera C-28, que en la ciudad pasa a llamarse Avenguda deth Pas d’Arró y Avenguda Castiero.

El Nere y la arteria de Vielha se cruzan en el lugar donde se levantaba un puente medieval, desaparecido en las riadas de 1937. Hoy el puente es moderno, pero las vistas al río y al casco histórico siguen siendo preciosas. El puente es el punto de inicio ideal para explorar el centro de Vielha. A un lado del río está el Carrer Sarriulèra –donde se abre la plaza de la iglesia con el ayuntamiento– y al otro el Carrèr Major. Al otro lado de la arteria, el Passeg dera Libertat. Esos tres son tus puntos de paso obligados. A partir de ahí, solo te queda callejear. En el camino, te encontrarás con joyitas como la casa señorial Ço de Rodès.

3. El Museo de la Val d’Aran

Si te preguntas si hay museos que visitar en Vielha, la respuesta es sí. El más importante es la sede central del Musèu dera Val d’Aran, en la torre del general Martinhon, un palacete del siglo XVII. Este museo etnográfico es el lugar ideal para iniciar tu visita a la Val d’Aran. Nosotros lo agradecimos mucho en las siguientes visitas: ya íbamos “aprendidos” sobre la geografía, la historia y la idiosincrasia de la Val d’Aran.

Descubrimos el origen de la lengua aranesa –un dialecto del occitano–; nos enteramos de momentos cruciales de la historia de la Val d’Aran, como cuando quedó definitivamente unida al reino de Aragón, en 1313, o cuando recuperó el Conselh Generau d’Aran, en 1991; aprendimos cómo está organizado administrativamente el valle, con sus terçons; nos sorprendimos con los orígenes de los nombres de sus pueblos o con sus fiestas y bailes típicos; supimos cómo afectó al valle la construcción del túnel que lo conecta con el resto de España… Un “baño de cultura aranesa” antes de vivirla en primera persona en sus pueblos.

En el museo no hay muchos objetos, son más bien pantallas y paneles informativos, pero sí hay algunos como el armario que guardaba los documentos del Conselh Generau d’Aran. Tiene una cerradura con seis llaves, una por cada terçon, para que se pudiera abrir solo con todos los conselhèrs presentes. Aquí era donde se guardaba la carta magna de Aran, Era Querimònia, de la que también se expone una copia en el museo.

4. El paseo por el río Garona

Ya hemos dicho que Vielha se encuentra en la confluencia de los ríos Nere y Garona. Pues, además de al Nere, también tienes que pasarte a presentarle tus respetos al Garona, uno de los grandes ríos de Europa occidental y de los más importantes de la vertiente atlántica. Porque sí, desemboca en el Atlántico, en Francia, cerca de Burdeos, después de pasar por Toulouse. El caso es que el paseo por las ribera del Garona también es bonito. No está rodeado de edificios históricos como el del Nere, pero las montañas al fondo te siguen acompañando.

5. La iglesia de Santa María de Mijaran

Siguiendo por el río Garona, llegamos hasta la iglesia de Santa María de Mijaran. En esta iglesia románica del siglo XII, que formaba parte de un monasterio, se veneraba la figura de la Mair de Diu de Mijaran, destruida durante la Guerra Civil. Aquí se encontraba originalmente el Descendimiento del Cristo de Mijaran. La iglesia, usada como polvorín, tampoco acabó bien parada y hoy quedan solo algunos restos de sus ábsides y paredes laterales.

En el nuevo edificio adosado a la iglesia es donde los conselhers y el Sindic d’Aran toman posesión de sus cargos en el Conselh Generau d’Aran, como lo hacían allá por el siglo XIII. No diríamos que es una parada obligada entre los lugares que visitar en Vielha, pero puedes parar si pasas en coche o dando un paseo.

6. Los pueblos de Vielha e Mijaran

El municipio de Vielha e Mijaran incluye, además de Vielha, otros doce pueblos. Siete de ellos tienen iglesias que forman parte de la ruta del románico de la Val d’Aran: Betlan, Montcorbau, Vilac, Gausac, Casau, Betren y Escunhau. Eso sí, en temporada baja ninguna se puede visitar. Nosotros nos acercamos a Escunhau, Gausac y Vilac.

En Escunhau, además de la iglesia de Sant Pèir con su portada románica con el Cristo crucificado, no hay que perderse la casa Père Joan, del siglo XIII, una de las más antiguas del valle.

En Gausac paramos de camino al bosque de Baricauba y la Bassa d’Oles, un bosque de abetos y un pequeño lago que son dos rincones naturales idílicos y visitas obligadas en los alrededores de Vielha. La iglesia de Sant Martín de Tours de Gausac nos llamó la atención y, aunque estuviera cerrada, como todas, nos acercamos a su portada. La sorpresa fue encontrarnos con la escultura de un Cristo empotrada en el muro del nártex de la entrada. Según leímos, seguramente su posición original era en un tímpano de la anterior iglesia románica –la actual es gótica–.

Por último, a Vilac pasamos de camino a Vilamòs y nos encontramos con uno de nuestros pueblos favoritos de la Val d’Aran. Un casco histórico pequeño, tranquilo y con vistas preciosas. La verdad es que parece la descripción de cualquier pueblo de la Val d’Aran, pero Vilac nos gustó particularmente, no sabríamos decir el porqué… Por supuesto, también nos acercamos a la iglesia de Sant Fèlix, con su portada románica rodeada por un marco ajedrezado típico de las iglesias de Aragón y Navarra.

Mapa con los lugares que ver en Vielha y alrededores

Aquí tienes nuestro mapa en el que te indicamos todos los lugares que ver en Vielha, para que organices más fácilmente tu visita.

Dónde dormir en Vielha: el Hotel Aran La Abuela

Como decíamos, Vielha es la base perfecta para conocer toda la Val d’Aran. Nosotros dormimos en el Hotel Aran La Abuela y nos parece una muy buena opción. La posición es perfecta, en plena arteria de Vielha, junto al casco histórico y cerca de los aparcamientos. Las habitaciones son amplias y cómodas, el personal es muy atento y simpático y tiene buena relación calidad precio. El desayuno es también bastante rico y variado. Si no te convence, puedes mirar más hoteles en Vielha. Eso sí, ten en cuenta que muchos cierran en temporada baja, abren solo en verano y en invierno.

Dónde comer en Vielha: Taberna Urtau

En el Hotel Aran La Abuela se puede comer: tienen opción de media pensión, menú del día, más tipos de menú y carta. La comida está bastante rica. Un día probamos la olha aranesa y nos encantó.

También comimos en la Taberna Urtau, una taberna con solete Repsol donde probar todas las especialidades del valle, olha aranesas y brasas ante todo. La tabla de quesos araneses, la sartén de huevos camperos con butifarra y los postres también estaban para chuparse los dedos. ¡Muy recomendable y bastante bien de precio!

Iglesias, paisajes, museos, buena comida… Vielha es una pequeña Val d’Aran dentro de la Val d’Aran.