Disneyland Paris no es un viaje cualquiera. Generalmente suele ser la culminación de un sueño, ya sea de nuestros hijos o más probablemente nuestro.

El caso es que como sueño que es, lo idealizamos y perseguimos el que todo sea perfecto e inolvidable. Realmente lo es, pero hay que tener en cuenta y ser conscientes que hay que hacer un derroche físico considerable y levantarse más pronto que si nos fuéramos a trabajar y por supuesto volver a última hora para aprovechar al máximo. Vamos, que dormir poco, ya os lo advertimos.

Disneyland Paris

Preparaos también para estrujaros las neuronas y organizar el planning del día para aprovechar al máximo vuestra visita. Y si no siempre podéis echar mano de los mejores consejos para no morir en el intento.

Fuera bromas, a Disneyland Paris hay que ir a disfrutar y aunque es bueno llevar un programa previo, también hay que dar pie a la improvisación y a la intuición.

En el siguiente artículo os describiremos, tal cual, nuestra ruta por Disneyland Paris durante dos días. El objetivo es que las familias que viajéis poco tiempo al famoso parque podáis ver que se pueden hacer muchas cosas y sobre todo disfrutar de una experiencia inolvidable. Preparaos para descubrir todas las novedades que han introducido en los dos parques con motivo del 25 aniversario de Disneyland Paris.

Dos días en Disneyland París

La última vez que fuimos lo hicimos en la vuelta de nuestro viaje de vacaciones veraniegas a Holanda, por tanto nos quedaba de paso y decidimos que los niños se merecían acabar a lo grande. Como llegamos por la tarde y hasta el día siguiente no teníamos entradas, no nos pudimos resistir a la tentación de visitar París al atardecer. Si no habéis estado nunca, o tenéis muy pico tiempo os recomendamos reservar una visita gratuita por la ciudad. Te permitirá conocer lo más importante en pocas horas.

Otra opción es disfrutar de un paseo en barco por el Sena. Es una forma genial de conocer la capital francesa, ya que ahorras fuerzas y puedes contemplar grandes vistas de monumentos tan importantes y emblemáticos como la Torre Eiffel o la catedral de Notre Dame.

Si preferís hacerlo desde el asfalto, no os perdáis el autobús turístico de la ciudad. La opción ideal para cuando estamos pocas horas en París y el complemento perfecto para vuestra estancia en Disneyland Paris.

Fue una tarde preciosa con un día perfecto, pero claro a Notre Dame, le siguió la Torre Eiffel por la noche y las obras de agosto en París que nos hicieron llegar a nuestro apartamento a las 1:30h. Por cierto, nosotros estuvimos haciendo una cola de unas 2 horitas de nada para sacar las entradas. Sed más inteligentes que nosotros y reservad las entradas con antelación. Ganaréis tiempo y reservaréis fuerzas (que ya necesitaréis más adelante) Reserva tus entradas a la Torre Eiffel sin colas aquí

Notre Dame de París

Como imaginaréis empezamos el día siguiente mal, ya que nos levantamos tarde y comenzamos a remolque el primer día en Disney. Por tanto, muy, muy importante. El día antes descansad todo lo que podáis y llegar al parque con media hora de antelación. Si vais en agosto y abren a las 10h, dormid bien la noche anterior y llegad al parque sobre las 9:30h. Pensad que hay que pasar por el peaje dónde compras el ticket del parquing, aparcar y llegar hasta la entrada del parque. Todo esto es tranquilamente 45 minutos. Si llegáis como nosotros sobre las 9:30h, os vais a tragar más retenciones para pasar el peaje, aparcar y para cruzar el estricto arco de seguridad del parque.

Si vais a Disneyland Paris por vuestra cuenta, tendréis que sacar las entradas y ya os advertimos que hay bastantes colas. A las de la noche anterior sumad hora y media más para sacar las entradas. Una vez más os recomendamos llevarlas compradas de antemano y os ahorráis más pérdidas de tiempo. En esta página puedes comprarlas con todo el proceso en castellano y así evitar las colas el día de la visita.

¡Entramos en Disneyland Paris!

Día 1 Disneyland París (opción Star Wars)

Con todo el ajetreo ocasionado por no haber salido una hora antes, podemos decir que nuestra primera atracción visitada fue a las 12h y fue la cueva del Dragón, que hay dentro del castillo de la Bella Durmiente. Tras ver el juego de luces y al dragón escupir fuego, nos dirigimos lo más rápido posible hacia Discoveryland, la zona del parque dónde Star Wars tiene más presencia. Antes de dejar Fantasy Land nos dio tiempo de hacernos unas fotos con la Reina de Corazones (no tenía muchos seguidores la pobre) y visitar la atracción de It’s a Small Wold.

La reina de corazones

Lo bueno de esta atracción, es que es rápida y permite que la hagan muchas personas a la vez, con lo que a pesar de que ya era hora punta, sólo hicimos unos 35 minutos de cola.

It’s a Small World

Notas sobre los Fast Pass (ahora Premier Acces)

Estos ya no existen. Disneyland Paris ya no ofrece este alivio para evitar colas. Matizamos si que ofrece un pase, en concreto el Premier Acces, pero este no es gratuito. Los precios van por persona y por atracción y son entre 5 y 17€. O sea que si queréis subir sin colas, preparaos para sacar la cartera, porque en una familia de 4 podéis pagar tranquilamente 40€ por saltarse las colas en una atracción. ¡Lamentable!

Todo lo que veais escrito sobre el Fast Pass ya no tiene validez desde verano de 2021.

Una vez ya en Discoveryland, primero planificamos nuestras visitas. Pensad que este es el área del parque dónde más posibilidades de usar el Fast Pass hay, así que conviene sacar un Fast Pass y mientras esperas a que llegue la hora, hacer la cola para otra atracción.

Dicho y hecho, primero optamos por sacar el Fast Pass para la atracción Star Tours y aprovechamos el tiempo libre para hacer una pequeña cola de 35 minutos para entrar a ver a Darth Vader (Meet Darth Vader) situado en Starport. La verdad es que nos encantó y eso que tampoco somos unos fanáticos de la saga. La estancia de la nave está muy bien recreada y acondicionada con luz y sonido. La verdad es que impresiona y hasta Jan se pegó bien a las piernas de su madre, cuando apareció Darth Vader y le habló. ¡Poca broma!

Meet Darth Vader

Cómo aún nos quedaba bastante tiempo hasta entrar en Star Tours (lo normal en agosto es que el fast pass te permita entrar en una atracción entre 2 y 3 horas después de sacarlo), nos dirigimos a la popular Autopia, una preciosa atracción dónde se conducen coches del futuro en los años 50. A lo niños les encanta por el grado de realismo que tiene. Lo malo es que no tiene Fast Pass y generalmente las colas son superiores a la hora, así que armaros de paciencia.

Autopia

Tras probar nuestras dotes al volante, salimos disparados para Star Tours, cumpliendo con la hora de entrada que teníamos en el ticket del Fast Pass. Esta atracción es el  clásico simulador de vuelo, con gafas 3D y con toda la fuerza y potencia de las aventuras de la Guerra de las Galaxias. ¡Salimos todos alucinados del ataque de los cazas imperiales!

Tras gastar nuestro fast pass, era hora de sacar otro y lo hicimos en la atracción de Buzzlightyear. Para aprovechar las dos horas de espera, Isa y el pequeño se fueron a la cola del Orbitron y Martina y yo al Star Wars Hyperspace Mountain. A esta atracción se puede entrar con Fast Pass, pero nosotros lo teníamos ocupado con la de Buzzlightyear y además sólo había 40 minutos de cola, así que con el tiempo justo entramos y disfrutamos de la mayor aventura galáctica de la Tierra. La clásica montaña rusa está ahora remasterizada con ataques de cazas imperiales, meteoritos y luz y sonido a toda mecha. ¡flipante!

Star Wars Hyperspace Mountain

Al salir nos fuimos corriendo directos a Buzzlighyear Laser Blast, una de las atracciones más divertidas del mundo Disney. Y es que a bordo de una vagoneta, hay que  disparar con nuestras pistolas a los malvados aliens. ¡Cómo siempre en estas ocasiones, Isa fue la que hizo más puntos! Por cierto la tienda a la salida de la atracción es espectacular.

La tarde estaba muy avanzada y habiéndole sacado el máximo partido a Discoveryland, nos fuimos a la zona de Frontierland dondé vimos el fascinante paisaje del oeste americano, con su precioso barco de vapor. Aquí decidimos cenar en el Cowboy Cookout Saloon, un restaurante con mesas de madera fuera y con especialidades a base de pollo y costillas de cerdo ahumadas. La verdad es que la calidad era superior a otros restaurantes del parque y los precios eran bastante económicos comparados con otros.

Antes de volver aprovechamos para visitar Adventureland y sobre todo la atracción de Piratas del Caribe, un divertido recorrido en barca por los escenarios y ambiente de la época pirata. Está muy logrado y encima corres el riesgo que te salpique el agua. A la hora que era (alrededor  de las 22h), sólo tuvimos que hacer tres cuartos de hora de cola.

Barco pirata

Y el fin de fiesta del primer día, tuvo lugar con el famoso espectáculo nocturno de Disney, con la iluminación y proyección de video en la fachada del castillo. Mickey, las princesas, Frozen y Star Wars son las estrellas de un espectáculo único en el mundo y que finaliza con un inolvidable castillo de fuegos artificiales.

Eso sí, para volver al apartamento u hotel, contad una hora, entre que salís tras las riadas de gente, llegáis al parking, etc…

Día 2 Walt Disney Studios y Disney Stars on Parade

Nuestro segundo día tenía estas dos prioridades, así que esta vez sí, nos levantamos pronto y antes de las 10h ya estábamos entrando en el segundo parque de Disney (en teoría abren a las 10h).

Nos fuimos directos a sacar el fast pass de Ratatouille y mientras esperabamos que llegara la hora, aprovechamos para montar tres veces en Cars Quatre Roues Rallye, una especie de tazas giratorias pero con coches de cars y que a los pequeños les encanta.

Cars

Mientras uno montaba con los niños, el otro hacía cola para hacerse fotos con Buzzlightyear. A primera hora aún no hay mucha gente y en veinte minutos ya habíamos podido saludar al héroe de Toy Story.

Con Buzzlightyear

Acto seguido pudimos disfrutar de la atracción de Ratatouille, para nosotros, una de las mejores de Disneyland París con diferencia. Es muy divertida y hay momentos que realmente te sientes uno de sus protagonistas corriendo por la cocina del restaurante, evitando escobazos y otros peligros.

Acto seguido y aprovechando que seguía habiendo poca gente, subimos al tétrico ascensor no apto para los que tenéis vértigo. El The Twilight Zone Tower of Terror es otra de las atracciones más potentes del parque. No desvelamos nada más, para que la sorpresa sea mayor.

El ascensor de la dimensión desconocida

Tras las emociones del ascensor, aún nos esperaba la montaña rusa de Aerosmith. La Rock’n Roller Coaster es una locura de aceleración, velocidad y gritos de la gente, con rock a todo volumen. ¡Bestial!

Llegaba el momento de parar un poco y nos dispusimos a disfrutar de otro de los mejores espectáculos de Disney: el Moteurs Action, casi una hora de diversión a dos y cuatro ruedas con escenas de películas, como persecuciones, saltos acrobáticos y tiros. Por momentos piensas que estás en un ballet de coches y motos. Muy recomendable.

¡Motors Action!

Espectáculo total

Motos en acción

Para finalizar nuestra visita a Walt Disney Studios, disfrutamos de un espectáculo precioso, tierno y reconocido mundialmente. Mickey y el Mago. No os lo perdáis: música, baile, princesas, personajes y la magia siempre presente. Si buscáis la esencia de Disney, no os lo podéis perder.

Antes de irnos vimos a Mickey firmando autógrafos y no pudimos dejar pasar la ocasión. Sólo ver cómo nuestro pequeño abrazaba al famoso ratón ya valió la pena pagar la entrada.

¡Te queremos Mickey!

Alrededor de las 16h salíamos de Walt Disney. No pudimos montar a la atracción de Nemo, hay muchas colas y no hay Fast Pass. Ya estuvimos en otra ocasión y es muy divertida, así que intentad subir.

Nosotros nos fuimos corriendo al parque de Disney ya que queríamos ver el famoso desfile de personajes. Éste empieza a las 17:30 pero nosotros decidimos ir con calma y a las 16:30h ya estábamos en Main Street sentados en un bordillo, para tener sitio asegurado y así poder verlo y grabarlo sin problemas.

Desfile de personajes Disney

Son momentos cansados porque tienes que guardar el sitio sentado en el suelo, pero vale mucho la pena porque luego lo puedes ver sin problemas.

Disney’s Parade

Tras el desfile decidimos visitar mejor la zona de Adventure land, que el día anterior no pudimos disfrutar mucho. La montaña rusa de Indiana Jones estaba imposible. Ya no había fast pass y las colas eran de una hora o más. Como no podíamos subir todos, fuimos a la isla de la aventura, con pasadizos secretos, grutas y hasta un tesoro. También visitamos la cabaña de Robinson Crusoe.

Para cenar decidimos ir al restaurante del día anterior, pero antes entramos a Phantom Manor, la casa encantada del salvaje oeste. Mención especial el banquete con los fantasmas bailando al son de una música gótica y tétrica. Es muy light y con niños de 5 o 6 años no hay problema.

Frontierland

Después de cenar, entramos en las atracciones de Pinocho y Blancanieves, que no es que sean muy emocionantes, pero si que te hacen arrancar una sonrisa, gracias a su aire retro y sobre todo por la presencia de los famosos personajes del cuento. Eran las 21-22h y las colas eran de una media hora. La gente se preparaba para el espectáculo nocturno, mientras nosotros nos despedíamos  del parque para poder descansar un poco antes de enfilar el viaje de vuelta a casa.

Hasta la próxima Disneyland Paris.

El castillo de Disneyland Paris