La ciudad santa Jerusalén se encuentra situada en los montes de Judea entre el mar Mediterráneo y el mar Muerto. Esta ciudad es considerada no solo sagrada sino la causa de conflicto entre Israel y Palestina, ya que ambas naciones la reclaman como su capital.
Los primeros hallazgos históricos de se remontan a la edad de Bronce entre los años 2.900 y 2.600 a.C, fundada por los jebuseos los cuales le colocaron el nombre de Salem colocándole a su alrededor fuertes murallas, impenetrables para los enemigos que pretendieran tomarla.
Para el siglo XI a.C, los israelitas de la mano del rey David, conquistaron la ciudad haciéndola capital de Israel y Judá. Con la muerte del David, el trono pasa a las manos de su hijo Salomón quien amplía sus murallas y construye el templo a Jehová donde se guarda el Arca de la Alianza, donde está escrita los principios de la ley judía.
Durante el año 922 a.C los reinos de Israel y Judá se separan manteniéndose como Jerusalén como la capital de Judá hasta el año 586 a.C, donde los babilonios conquistan la ciudad, destruyen el templo creado por Salomón y llevando a sus habitantes a un cautiverio, pero no fue sino hasta el año 539 a.C cuando los judíos los derrotaron y lograron reconstruir la ciudad.
Cuando el conquistador Alejandro Magno vence a los persas en el año 332 a.C, comenzó su dominio por las tierras orientales, y Jerusalén fue una de esas tierras. Luego de su muerte, la ciudad pasó a manos del Imperio Selécida hasta el año 142 a.C.
Los judíos son dominados en el año 63 a.C por el general Pompeyp, quien nombra a Herodes como gobernador en el año 37 a.C y comienza a edificar nuevas estructuras en la ciudad y reestructurando otras, entre ellas el templo de una forma más ampliada, pero tras una revuelta los romanos vuelven a destruir el templo.
La cuidad es catalogada también sagrada porque allí nació y murió Jesús de Nazaret donde realizó innumerables milagros y trajo consigo la verdad y la vida para el mundo. Entre los puntos turísticos más importantes está El Monte de los Olivos.
Idioma
El hebreo es uno de los idiomas que se maneja dentro de Jerusalén, por lo que es importante que las personas conozcan algunas palabras y su significado.
- Hola: Schalom!
- Adiós: Bay
- Hasta luego: Lehitraot
- Buenos días: Jom tow
- Buenas tardes: Erew tow
- Buenas noches: Laila tow
- Por favor: Bewakascha
- Gracias: Toda
- De nada: Bewakascha
- Lo siento: Ani mitstaer
