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Eco Turismo: lugares en el tiempo – Un blog de Palo

Hubo un tiempo en el que Úbeda se convirtió en una de las capitales europeas del Renacimiento. Un tiempo en el cual la ciudad destacaba no sólo por la abundancia de construcciones y el auge político de algunos personajes, si no por la convivencia de culturas que propiciaron la perpetuidad de su legado histórico y cultural. En la actualidad, Úbeda enigmática, es una ciudad bella, colmada de edificios históricos, tantos que es la segunda en el mundo que más atesora por metro cuadrado. Pero también es un lugar enigmático que año tras año redescubre su historia gracias a la labor de una serie de mecenas y profesionales que lo están poniendo en valor.

Acompáñame en este viaje por la Úbeda secular, entre los que destacan algunos lugares de referencia y otros hasta ahora ocultos en los que se revive la historia de los que habitaron en ellos. Edificios históricos tan conocidos como la Capilla del Salvador, el Hospital de Santiago o lugares como la judería, revisitados desde un punto de vista diverso en el que se cruza la historia con el mito. 

Úbeda enigmática: lugares donde la historia se cruza con el misterio

La Capilla del Salvador de Úbeda

No por ser este uno de los edificios más importantes de esta ciudad, debería dejar de aparecer en una ruta por la Úbeda enigmática. No en vano, son numerosos los estudios que se han hecho sobre las alegorías y programas iconográficos representados tanto en este edificio como en el Hospital de Santiago como el de Joaquín Montes Bardo en la revista Laboratorio de Arte nº10 de 1997.

En él se recogen algunos de los misterios que recorren las fachadas y elementos decorativos de este imponente edificio, uno de los más bellos no sólo del Renacimiento Andaluz, si no del español. Pero no vamos a pretender aquí desarrollar el maravilloso texto sobre la iconografía de estos edificios, si no hacer alusión al importantísimo programa que aparece tanto en la fachada como en la Sacristía del Salvador, llena de figuras de la mitología clásica, personajes representativos de la antigüedad y, por supuesto, del cristianismo.

Fachada de la Capilla del Salvador en Úbeda
Fachada de la Capilla del Salvador en Úbeda

Según algunos autores la fachada de la Capilla del Salvador, obra de Diego de Siloé, pretende instruir a los hombres, del mismo modo que la Divina Comedia de Dante, para llegar a la salvación del alma a través de las alegorías y el carácter mitológico de sus personajes. El espacio de la Sacristía, obra de Andrés de Vandelvira, con el trabajo escultórico de Esteban Jamete, tiene un programa iconográfico enigmático en el que personajes clásicos, probablemente virtuosos, hacen referencia al prototipo del héroe, tan del gusto renacentista y que recuerdan a algunos otros programas de la ciudad de Salamanca.

Puestos a hablar de enigmas, no podemos dejar de admirar los personajes de los medallones de esta sacristía, muchos de ellos todavía por descubrir. Personajes mitológicos, dioses, profetas, sabios o sibilas, entre los que el mismísimo maestro Santiago Sebastián identifica a Hebe hija de Zeus y diosa de la juventud. ¿Puede haber algo más curioso que una diosa griega en una sacristía renacentista? Sin duda, un auténtico misterio en esta Úbeda enigmática.

Medallones renacentistas de la Sacristía del Salvador de Úbeda
Medallones renacentistas de la Sacristía del Salvador de Úbeda

La Casa de los Salvajes

Si hay un lugar misterioso en Úbeda este es la casa de los Salvajes. Ya Joaquín Montes la nombraba en su repertorio de iconografía ubetense dando una interpretación sobre su icónica fachada con “salvajes”. Este valioso edificio, construido en el inicio del siglo XVI, fue la residencia de un ilustre personaje de Úbeda, Francisco de Vago, camarero del Obispo Alonso Suárez de la Fuente, quien aparece representado en la fachada a través de su escudo.

A los lados del escudo, como tenentes, los dos “salvajes” provenientes directamente del imaginario medieval en el que este término representaba a unos personajes prácticamente fantásticos, medio animal, medio humano, con el cuerpo lleno de pelo. Hay muchos ejemplos en la arquitectura hispánica (Castillo de Escalona, sepulcro de  Juan de Cerezuela en Toledo, colegio de San Gregorio en Valladolid) en el que un par de salvajes sujeta el escudo de un personaje de cierta relevancia. En origen, esta representación era un símbolo de fortaleza, los salvajes y su fuerza soportando el escudo familiar, sin embargo, con el paso del tiempo el valor simbólico dio paso a un simple elemento decorativo.

Fachada de la casa de los Salvajes en Úbeda
Fachada de la casa de los Salvajes en Úbeda

Por supuesto, no nos olvidamos de que la figura del salvaje fue también la alegoría de las pasiones. Los salvajes encadenados por estar sometidos a las pasiones, cuya salvación será la creencia en el cristianismo gracias a la llegada de la religión a sus vidas. Sin lugar a dudas, una casa enigmática, no sólo en su fachada, y llena de leyendas tradicionales que le han conferido un aura de misterio a lo largo de los siglos.

La Plazuela de la judería

En los últimos años se han puesto en valor dos lugares fundamentales en la historia de uno de los grupos de población más importante que tuvo Úbeda, el hebreo. Los judíos formaron parte de la vida social y cultural de la Úbeda medieval, de ello da cuenta la judería en la que habitaron durante unos 200 años. La ciudad está llena de elementos que recuerdan el paso del pueblo judío a través, sobre todo, de construcciones y formas decorativas en estos.

Existen algunos lugares de interés y fuerte simbolismo como antiguas casa judías o la Sinagoga de Salomón, que se pueden visitar en distintas rutas por la ciudad. Sin embargo, llaman la atención los últimos espacios que se han abierto al público y que ponen de manifiesto la importancia del legado hebreo entre los muros de Úbeda. Entre ellos destaca la Plazuela de la Judería, que ocupa buena parte de lo que fue la judería medieval y que hasta hace pocos años estuvo ocupada por viviendas. Este espacio histórico se abrió al público recientemente, gracias a la familia Crespo López, mecenas de este proyecto, para poner de manifiesto y rescatar el pasado de la antigua judería y resaltar su importancia en la historia ubetense.

El espacio es absolutamente mágico, aunque todavía no ha terminado su desarrollo, ya que el proyecto sigue en marcha por parte de la familia Crespo López. Sin duda, es un lugar único en el que se mezcla la historia y las sensaciones de un pueblo tan castigado y con tanta necesidad de expresión. La Plazuela realiza visitas guiadas de en torno a una hora de duración que merecen muchísimo la pena, para entender el porqué de la recuperación de este espacio y su importancia en la ciudad. Podéis visitar la web de La Plazuela de la Judería para organizar la visita, ¡no os la perdáis!

La Sinagoga del Agua

Por increíble que parezca, en el mismísimo siglo XXI siguen apareciendo huellas de la Úbeda enigmática y más desconocida. Casi por casualidad, hace pocos años, en los trabajos de adecuación de unas propiedades de la familia Crespo-López se descubrió una sinagoga medieval. Las viviendas y negocios situados en la antigua sinagoga habían hecho desaparecer bajo sus muros cualquier huella del edificio que habían albergado siglos atrás. No sólo se trataba de un sinagoga, el espacio probablemente sirvió de residencia para el rabino, ya que hay elementos en la parte inferior comunes en las viviendas medievales e, incluso, un gran patio que se erige como elemento distribuidor del resto de estancias.

Bodega de la casa que probablemente ocupó el rabino

El inicio de la remodelación trajo consigo la aparición de galerías de piedra, arcadas y un “sótano” que una vez limpio descubrió una serie de espacios muy significativos. Una de las curiosidades de este edificio es que justo al lado se encontraba la casa del Inquisidor, estancia del principal valedor del Santo Oficio en la ciudad, representante máximo de la Inquisición. Aunque se desconoce si hubo relación entre ambas construcciones, la cercanía entre ellas revela el probable conocimiento por parte del inquisidor de este edificio. Uno de los espacios más interesantes es la Galería de las Mujeres, donde se situaban en cierta manera ocultas tras las celosías para asistir a oficios y celebraciones en la oscuridad.

Entre las principales estancias, seguramente la que confiere de una importancia central al lugar, es el Mikvéh, la sala del baño ritual. De acceso prácticamente escondido, era el lugar sagrado para la purificación de los judíos y el desarrollo de las grandes fiestas religiosas de la comunidad. En este espacio, excavado en la roca, se respira una atmósfera mágica, del cuál sólo diré que en ciertos días del año la luz envuelve la sala en una conjunción prácticamente mística y muy evocadora. Un lugar que llena de paz a los que la visitan en el respeto de las comunidades que lo utilizaron y que, todavía a día de hoy, pueden hacer uso de este en ocasiones especiales.

Mikveh de la Sinagoga del Agua
Mikveh de la Sinagoga del Agua

La Sinagoga del Agua está abierta al público todos los días de la semana, en horario de mañana y tarde. Sólo se puede visitar con guía en visitas que duran una media hora y que son una auténtica delicia ya que a través de ellas se conoce el importantísimo legado del pueblo judío en Úbeda.

El Misterio de la Casa de las Torres

Entre los enigmas de Úbeda, no nos podemos olvidar de aquellos más misteriosos y que salen de la historia e, incluso, van más allá de lo racional. Una ciudad histórica, en la que el paso del tiempo ha dejado su huella, no podía no estar rodeada de leyendas enigmáticas como la de la Casa de las Torres. Se trata de un imponente palacio del siglo XVI cuya bella portada renacentista está enmarcada por dos grandes y sobrios torreones que le dan un aspecto de fortaleza y que, actualmente, es un instituto de artes.

Fachada principal de la Casa de las Torres
Fachada principal de la Casa de las Torres

Además del simbolismo que encierra esta bella construcción, tras sus muros se esconde una leyenda con visos sobrenaturales. En el interior del palacio, aparece y se escucha, una dama que sufre el paso de los siglos entre lamentos fruto del más terrible de los finales. La dama blanca que aparece en este palacio sería Ana de Orozco, esposa del propietario de la casa en el siglo XVI, Andrés Dávalos. El hombre, celoso de su esposa, desconfiaba de la lealtad tras una infidelidad de la joven con un hombre de su edad y al que amaba antes de casarse don Don Andrés. La locura del marido fue tal, que ante la duda, decidió vestir a la joven de monja y emparedarla viva entre los muros del palacio, que se convirtió no sólo en su cárcel si no también en su tumba.

La historia quedó totalmente olvidada, de aquella mujer poco se conoció, hasta que en el inicio del siglo XX se acometieron una serie de obras en el palacio. En los trabajo se encontró el cadáver de una mujer momificado y ataviado con ropas antiguas y algunas joyas que dieron veracidad a la terrible historia de Doña Ana de Orozco. Leyenda o realidad, sin duda alguna, la Casa de las Torres es uno de los lugares imprescindibles en una ruta por la Úbeda enigmática.

El Hospital de Santiago

En una ruta por la Úbeda enigmática no podíamos dejar pasar una referencia al Hospital de Santiago. Situado a las afueras de la ciudad, fue un lugar de paz para aquellos que padecían algunas enfermedades con cierto nivel de contagio. La obra, sostenida económicamente por Diego de los Cobos, fue proyectada por Andrés de Vandelvira en 1562 y se finalizó más de una década después. En el edificio destaca el patio renacentista central que distribuye el resto de estancias, entre ellas una capilla hoy aula de actividades y conferencias y una imponente escalera.

Pero este magnífico edificio ha estado rodeado siempre de innumerables misterios, no sólo en cuanto a los programas iconográficos que se desarrollan en la imponente bóveda de las escalera de acceso a los niveles superiores, si no a un cierto halo de leyenda que corre entre sus estancias. El misterio se ha convertido en reclamo para algunos medios de comunicación que afirman que en este hospital se producen fenómenos inexplicables relacionados con lo fantasmagórico. El mismísimo Iker Jiménez se ha llegado a hacer eco de algunas apariciones producidas e, incluso, filmadas en estos últimos años.

Vista del patio del hospital de Santiago.
Vista del patio del hospital de Santiago.

Leyenda, historia, realidad y quizá ficción, se dan encuentro en este magnífico edificio del siglo XVI que es un icono de esta Úbeda enigmática. El Hospital de Santiago es uno de esos edificios con alma, fruto de la ambición de algunos de los protagonistas de la historia, construcciones que nos acercan el legado religioso, cultural y tradicional de una ciudad que revive y redescubre su maravilloso pasado.

Este post ha sido fruto del blog trip llevado a cabo gracias a Tubba Asociación para el desarrollo turístico de Úbeda y Baeza. Agradezco en especial a Andrea Pezzini y a Esperanza que nos acompañaron en este recorrido enigmático y maravilloso por ambas ciudades.

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